Mar 242020
 

Columna de la autoría del Dr. Luis M. Baquero Rosas y publicada por el Nuevo Día

Por muchos años en las aulas universitarias de Puerto Rico se ha venido debatiendo el impacto que ha tenido en la educación presencial tradicional, así como la deseabilidad de fomentar, el desarrollo de las tecnologías educativas virtuales y los sistemas de administración del aprendizaje conocidas en inglés como “Learning Management Systems” (LMS por sus siglas en inglés).

Estas plataformas de educación en línea tienen como función manejar, entre otras cosas, la asistencia de los estudiantes virtuales, que es un requisito fundamental para evidenciar a las entidades como el Departamento de Educación de Estados Unidos que ofrecen ayudas financieras, en muchos casos hasta a un 90% de los estudiantes universitarios registrados en un curso. También permiten a los profesores mantener contacto mediante actividades sincrónicas (reuniones virtuales a la hora de la clase) y asincrónicas (videos, foros, tareas, exámenes programados) con estudiantes en y fuera de Puerto Rico. Aseguran el manejo efectivo de los exámenes en línea y la calidad de trabajos sometidos en línea para evitar situaciones como el plagio, el copiar y pegar y el uso de información de apoyo mientras se responden los exámenes y pruebas que confirman el aprendizaje y desarrollo de conocimiento, que es el servicio que ofrecen las universidades.

En las pasadas dos semanas, todo cambió para el 100% de los profesores de todas las universidades en Puerto Rico, que al día de hoy se encuentran cerradas para ofrecer servicios y cursos presenciales, cumpliendo con las instrucciones de entidades como el Departamento de Educación y agencias acreditadoras como la Middle State for Higher Education para combatir la pandemia del coronavirus mediante la política de aislamiento social. La inmensa mayoría de los profesores ha podido emigrar a ofrecer cursos remotos en plataformas pagadas por las instituciones educativas y en portales libres de costo, permitiendo que los estudiantes entren a reuniones virtuales para integrarse como grupos de clases dentro del aislamiento social.

No obstante, esta nueva realidad ha traído a la superficie retos y áreas de mejoramiento, ya que urge al país crear políticas que permitan a todos los estudiantes, profesores, hogares y ciudadanos tener acceso a servicios de telecomunicaciones confiables, disponibles y a costos asequibles, además de tener la capacidad de adquirir sistemas de computadoras libres de IVU, al ser consideradas una herramienta básica de educación.

Hace un mes, para muchos profesores en la universidad la educación virtual era una alternativa evitable … hoy 100% de ellos estará estas semanas atendiendo a aproximadamente 200,000 estudiantes en Puerto Rico.

El Dr. Luis M. Baquero Rosas es Catedrático Auxiliar del recinto de Mayagüez de la Ponticia Universidad Católica de Puerto Rico.