El recinto de Mayagüez de la PUCPR celebra las Bodas de Plata del Rev. Padre Albert.
Por: Jalibeth Rodriguez Rivera
El 21 de septiembre de 1989 Mons. Ulises Casiano le confirió la ordenación sacerdotal en su ciudad natal, Mayagüez. Hoy, veinticinco años después, asegura sentirse motivado y alegre de servir a la Iglesia como sacerdote. “Estoy muy contento porque siento que culminé veinticinco años de entrega a la vida religiosa, pero con mucha energía para continuar veinticinco años más”, reiteró el Reverendo Padre Luis Alberto Rodríguez Vientós.
El actual Capellán del recinto de Mayagüez de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico admitió que se encuentra en el lugar “donde Dios me llamó. Esto fue fruto de un proceso porque a medida que pasaron los años, confirmé que Dios me eligió para servir. Soy obra de Dios porque me concibió para esto”, apuntó.
En el 1983 el Padre Luis Alberto obtuvo un Bachillerato en Artes en el recinto de Mayagüez de la Universidad de Puerto Rico. Fue en esa etapa de su vida, según reveló a Huellas del Futuro, que sintió el especial llamado. “El momento que me iluminó por completo fue una tarde que llegué de la Universidad a mi casa. Recuerdo que mi mamá veía televisión y en ese instante reportaban una visita del entonces Papa Juan Pablo Segundo a Filipinas. Él hizo un llamado a los jóvenes diciendo – invito a los jóvenes a que sientan el llamado. Dile sí a Jesucristo.- Sentí que me señaló y en ese momento entendí que no tenía dudas. Fue una inspiración”, rememoró.
Esa invitación fue determinante para la vida del sacerdote. Luego de su ordenación, sirvió en España. De hecho, fue colaborador en la Parroquia San Pablo, en Oviedo, al norte de España, del 1989 al 1990. Posteriormente, obtuvo una licenciatura en Teología Bíblica de la Universidad Pontificia de Salamanca, España en el 1994.
Al año siguiente, Padre Albert como cariñosamente le dicen los estudiantes, ingresó a la PUCPR como profesor de Teología y, desde el 2006, sirve como Capellán del recinto mayagüezano. “Me he sentido como pez en el agua porque mi interés es compartir conocimientos y ayudar a los jóvenes a descubrir la fe católica. Además, estoy cerca de ellos para apoyarlos y ofrecerles orientación espiritual. Trabajar con jóvenes es fascinante. Trato de hacerlos sentir acogidos, comprendidos y entusiasmados por las cosas de Jesús”, insistió.
En la celebración de sus Bodas de Plata, el recinto de Mayagüez de la PUCPR, reconoce el amor y el servicio del Padre hacia los demás. Para la rectora del recinto de Mayaguez, Dra. Olga Hernández de Patiño, “lo más que distingue a Padre Albert es su humildad y el que siempre está accesible, día y noche, para ayudar a nuestros estudiantes y a toda la comunidad universitaria. Floreció en el servicio a los demás a través de Jesús. Por eso, la comunidad universitaria se une a la celebración de su aniversario”.
Mientras, la decana asociada de Asuntos Administrativos, profesora Nilsa Soto Cruz dijo “Nos sentimos muy orgullosos y honrados de tener como director espiritual a nuestro querido Padre Albert. Lo felicitamos en sus Bodas de Plata y pedimos a Dios que lo continúe bendiciendo. Que el Espíritu Santo lo ilumine para dirigir, espiritualmente, nuestro recinto y que nuestra Señora, Madre de la Sabiduría, siga siendo su ejemplo de servicio y entrega a Jesús”.
Entre sus labores pastorales, además se destacan las siguientes:
- Sirve en el Centro Pablo VI., que pertenece al Instituto Secular Acies Christi.
- Director espiritual de los Talleres Prematrimoniales de Mayagüez.
- Colaborador de la Pastoral Juvenil Diocesana.
- Capellán del Hogar de Ancianos San José.
- Conferenciante de charlas formativas para las candidatas a los votos perpetuos de las Siervas de María en Mayagüez.
“Me siento contento de estar en una comunidad donde puedo comunicar a cada miembro algo de Jesús. A través de lo que hago, pretendo ser una tierra de encuentro entre Dios y las personas”, finalizó el Sacerdote.