Recinto de Mayagüez certifica a educadores en curso de práctica docente.
Jalibeth Rodríguez Rivera
Cerca de quince educadores de diversos distritos escolares de la región oeste del sistema público y privado de Puerto Rico se convirtieron en maestros cooperadores. Esto, luego de participar del curso Orientación y Supervisión de la Práctica Docente que ofreció el recinto de Mayagüez de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico. El programa, a cargo del Colegio de Educación del Recinto, impactó a maestros altamente calificados que supervisarán a estudiantes practicantes universitarios. Se trató de un curso intensivo de un poco más de dos semanas durante el mes de junio.
“El Departamento de Educación requiere que los maestros de la sala de clases que apoyen a los estudiantes practicantes de diversas universidades tengan una certificación como maestro cooperador. Así que, en su fiel compromiso con la educación, la PUCPR ofrece este curso libre de costo para los maestros. De esta manera, le permite a la Universidad presentar su Visión y Misión”, dijo el profesor Jorge L. Crespo Hernández, catedrático auxiliar del Colegio de Educación y de Artes Humanidades del recinto mayagüezano.
Como parte de la dinámica del curso, se analiza la base legal de la práctica docente y sus implicaciones, así como la política y los procedimientos. Además, se discuten las cartas circulares, los reglamentos y la documentación relacionada con la docencia. “Se trabaja con la base legal de lo que implica ser un maestro cooperador y su enlace con el practicante. En adición, se le proveen estrategias de vanguardia que lo conviertan en un maestro innovador. En este caso, se identificaron recursos, especialistas en varios temas, quienes ofrecieron conferencias sobre nuevos procedimientos en el Departamento de Educación. Además, los maestros estudiantes presentaron estrategias distintas que utilizan en sus salones de clases. Fue un curso interactivo”, detalló el profesor a cargo.
Algunos de los recursos fueron el profesor Wilson González Hernández, especialista en la materia de Matemáticas del Departamento de Educación; la doctora Norma Cardona Sepúlveda, experta en avaluó y profesora de la PUCPR, el director de la Biblioteca del Recinto, profesor Edwin Ramos, la investigadora en la disciplina de español, doctora Cielo Nieves; el doctor Cristian Marrero, psicólogo industrial, motivador y director del Programa de Estudios Graduados del Recinto; y la abogada, Lic. Heidi Rivera.
“Otra de las estrategias educativas utilizadas con sorprendentes resultados fue la presentación de la película La sociedad de los poetas muertos. Al analizarla, se incorporaron nuevos modelos de enseñanza a los ya utilizados por nuestros mentores. Los asistentes aportaron al curso la técnica de enseñanza que más pertinencia ha tenido con sus estudiantes. Las diversas estrategias y técnicas acompañadas con reflexiones motivadoras facilitaron nuevos enfoques para todos”, aseveró Crespo Hernández.
Mientras, para el maestro de ciencias del Colegio Católico de La Salle en Añasco, Wilson Alberto Ramos Soto, participar de este curso le abrió una nueva perspectiva de los cambios que implementó este año el Departamento de Educación. “Aprendí nuevas técnicas y el nuevo formato que tiene el Departamento de Educación en cuanto a los mapas curriculares y a la planificación. Tuvimos varios recursos que nos ayudaron y aportaron en nuestro crecimiento profesional. Cubrían desde el área de autoestima hasta el aspecto legal”, dijo.
Wilson Alberto, quien lleva cerca de tres años enseñando, admitió que implementará en su salón de clases muchas estrategias que aprendió como parte de las presentaciones. “Fue un curso divertido, tuvimos una enseñanza real de lo que vamos a encontrar cuando llegue un estudiante practicante al salón de clases. Nosotros, como educadores con experiencia en el campo real, les daremos las herramientas para guiar a los futuros maestros profesionales”.
Continuó “Tenemos vocación inspiración y liderato para llevar a los maestros practicantes a desarrollarse. El campo de la educación en Puerto Rico debe mejorar y está en cada uno de nosotros, como educadores, hacerlo. Todo evoluciona”.
El grupo, además, participó de una excursión educativa. Visitaron varios lugares turísticos del pueblo de Lajas y compartieron sus experiencias como educadores.
Como requisito final, los participantes entregaron un portafolio que incluía una recopilación y análisis crítico de cada una de las actividades. El profesor enfatizó “El grupo fue excepcional. Los trabajos superaron los criterios establecidos. Al final del curso entregaron una carpeta con todos los trabajos que incluía análisis críticos de las conferencias y actividades como técnicas de enseñanza”.
“Realmente estoy muy contento con que la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico esté comprometida con estas iniciativas. Fue una experiencia que me llenó de mucha satisfacción como persona y como profesional”, expresó el joven maestro Wilson Ramos Soto.